Está recluido en la cárcel La Picota, de Bogotá, y aguarda que un avión de la DEA lo traslade a una cárcel de Nueva York para que responda por narcotráfico.
Un avión de la DEA está próximo a recoger en Bogotá a un polémico personaje que ganó fama en Ecuador por su cercanía con el expresidente Rafael Correa, prófugo de la justicia de ese país, y quien pasa sus noches de en la cárcel La Picota.
Su nombre es Cao Lay Muñoz Gallón y aparece en varios expedientes judiciales relacionados con un supuesto movimiento de dinero que habría facilitado que el ahora exmandatario, prófugo de la justicia de su país, se quedara unos años más en el poder.
Lo que dice el expediente es que este personaje, que está pendiente de que se ejecute su extradición a Nueva York por cargos de narcotráfico, habría movido dinero en efectivo por más de 3 millones de dólares para que la Asamblea Nacional –con sede en Quito (la capital)– no avalara una reforma constitucional que sacaba a Correa del poder.
Por eso fue bautizado “el hombre del maletín”, ya que en el 2008 –cuando estalló el escándalo en torno a que personas cercanas a Rafael Correa supuestamente movían dólares en efectivo para comprar votos en el Congreso ecuatoriano– se supo de movimientos de dinero para que no se avalara una reforma a la carta política que establecía límites a la reelección presidencial.
En el expediente judicial se reseñó que Cao Lay Muñoz Gallón habría buscado al entonces asambleísta Gabriel Rivera para que, a través suyo, se lograra cambiar el voto de al menos 20 miembros más de la Asamblea a cambio de un jugoso soborno.
La Fiscalía de Ecuador notificó que había videos y grabaciones que corroboraban su implicación en este acto ilícito, pero –no obstante– terminó absuelto por la justicia de ese país y puesto en libertad tras un polémico proceso penal que se extendió hasta 2010.
De hecho, en ese mismo año terminó envuelto en otro escándalo porque fue capturado cuando movía más de 80.000 dólares sin declarar en un vuelo que realizaba desde México a Colombia. Eso sí, también terminó absuelto.
Pero lo que no sabía de este ecuatoriano que se movía por Colombia es que agentes federales le seguían la pista por su supuesta participación en el envío de cocaína a Estados Unidos desde Suramérica.
El rastreo que se le hacía a sus movimientos tenía que ver con la cantidad de dinero en efectivo que manejaba y, por eso, en un paso que hizo de Ecuador a Colombia terminó capturado. En efecto, el 14 de junio de 2022 fue abordado en Ipiales, Nariño, por agentes de la Interpol que le notificaron sobre la circular roja que pesaba en su contra. Y procedieron a esposarlo.
Muñoz Gallón pasó desde la población fronteriza de esmeraldas, donde se dedicaba a negocios relacionados con el turismo e, incluso, acostumbra a cruzar la frontera con cierta frecuencia para adquirir productos que en Colombia, por la dolarización de Ecuador, le salían más baratos.
De hecho, al momento de su captura, estaba hospedado en un hotel del lado colombiano de la frontera.
“Este ciudadano es el objeto de una acusación en el caso número 22 CRIM 357, dictada el 28 de junio de 2022, en la Corte para el Distrito Sur de Nueva York”, se lee en el expediente federal al que tuvo acceso este diario.
De acuerdo con esos folios judiciales, este sujeto, aún preso en La Picota, fue clave para mover grandes cantidades de cocaína que iban para la región más occidental de Estados Unidos.
En todo caso, de acuerdo con información recogida por el diario Expreso, de Ecuador, Muñoz Gallón se siente un perseguido por no haber, supuestamente, entregado información de Correa.
“Yo estoy detenido en Bogotá porque no quise dar información de Correa, que no tengo, y lo mínimo que me han puesto es un caso de narcotráfico o de conspiración. Para conspiración tiene que haber mínimo tres personas o cinco, y no hay nadie, solo estoy yo, es un absurdo sin pies y cabeza, ¿con quién voy a traficar yo entonces?”, le aseguró a Expreso.
En todo caso, el presidente Gustavo Petro firmó su extracción el pasado 1 de mayo, a través de la resolución 113 de 2023, pese a su cercanía ideológica con quien es considerado un personaje de izquierda muy popular en Ecuador, como Rafael Correa, pero al mismo tiempo un prófugo de la justicia.
“Conceder la extradición del ciudadano ecuatoriano”, se lee en el documento firmado por Petro.
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